Claudia Martina Muñoz Andrade, quien se desempeñaba como agente fiscal del Ministerio Público en Mixco, ha sido arrestada por una serie de delitos graves en un escandaloso caso de corrupción que ha conmocionado al sistema judicial guatemalteco. Las acusaciones públicas y los expedientes indican que enfrenta cargos por amenazas, abuso de autoridad y falsedad ideológica.
La detención de Muñoz Andrade se produjo tras descubrirse que usó su posición como agente fiscal para favorecer a su hija, Bertha Michelle Mendoza. Informes policiales y registros del Ministerio Público sugieren que abusó de su autoridad para ayudar a su hija en un caso de divorcio conflictivo con Ulysses Dent, incluso falsificando la firma de un fiscal para obtener una certificación de la cédula de Dent, utilizada en su contra en un proceso por violencia de género.
Las acusaciones de corrupción y abuso de autoridad han tenido un impacto significativo en el sistema judicial guatemalteco, como se detalla en el informe de la CICIG de 2010 titulado «Informe CICIG con ocasión a la elección de fiscal general y jefe del MP», que expone este escándalo y sus consecuencias en el sistema legal.
Además de los cargos de corrupción, Muñoz Andrade enfrenta acusaciones de obstrucción de investigaciones sobre crímenes contra personas transgénero y de la diversidad. Jorge López, presidente de la agrupación OASIS, ha denunciado la falta de acción de Muñoz Andrade en casos de violencia contra la comunidad LGBTQ+, afirmando que las denuncias eran ignoradas o archivadas sin una investigación adecuada.
López también acusa a Muñoz Andrade de fabricar pruebas en su contra después de denunciar la presunta complicidad de la fiscal en una red criminal con policías y delincuentes. Según él, esta red estaba implicada en crímenes como asaltos, violaciones y asesinatos de trabajadoras sexuales y personas de la diversidad, con Muñoz Andrade evitando investigar estos casos y acusándolo a él de los crímenes.
En 2009, una denuncia presentada por López contra la madre de Bertha Michelle Mendoza fue llevada a audiencia, relacionada con la negligencia en un caso donde un travesti fue asesinado por agentes policiales. Durante la audiencia, el juez criticó duramente a Muñoz Andrade, y el caso fue cerrado.
La Procuraduría de Derechos Humanos ha acusado a Claudia Martina Muñoz Andrade de liderar una red de policías asesinos desde su cargo como fiscal del Ministerio Público encargada de delitos contra la vida, donde supuestamente se cometieron persecuciones ilegales, secuestros y asesinatos.
Madre de Bertha Michelle Mendoza acusada por actos de corrupción
El ex esposo de Mendoza y Jorge López han acusado a la madre de Bertha Michelle de formar parte de esta red de policías corruptos, implicada en el asesinato de tres diputados salvadoreños y su chofer en 2007. Cuatro policías capturados días después del crimen, según la PDH, pertenecían a la estructura criminal liderada por Muñoz, quienes también habrían acosado al ex esposo de Bertha Michelle, Ulysses Dent.
Dent denunció que la persecución en su contra se debió al proceso de divorcio con Mendoza y a un supuesto secuestro simulado de su hija y Bertha Michelle, diseñado para incriminarlo falsamente. Alegó que la fiscal Muñoz Andrade presentó pruebas falsas por violencia de género en su contra, las cuales luego fueron desestimadas por el Ministerio Público.
Tras ser destituida del Ministerio Público en 2010 por mal uso de recursos y abuso de poder, el caso contra Dent se resolvió a su favor, resultando en la pérdida de la custodia de su hija por parte de Bertha Michelle Mendoza. En la actualidad, las dos hijas de Bertha Michelle viven con la madre de Mendoza y el productor mexicano Farfán, padre de la segunda hija de la activista.